sábado, 22 de enero de 2011
PREGO!
¡Milagro! Pude salir por fin de la Isla maldita por la "ley de Murphy" y maldita por la ley de las compañías de "Low Cost". Mejor no diré nombres ya que no es momento ni lugar para despotricar, ellas ya se han criado la fama suficiente; Lo importante es que he llegado bien. En el aeropuerto de Dublín, después de todo el estrés, me permití el lujo de tomarme mi último café de 3,50 euros en el Buttler's coffe.
Qué bonita es Italia y Roma es una ciudad que inspira a amar, bailar, comer i pintar. Sólo me queda pintar.
Foto: Al quitar la cucharita de la taza del capuccino que estaba tomando en la casa de Dublín, se hizo esta forma de corazón. Oh, que romàntic!